Hace días (por
motivos personales) que no escribo apenas, hoy me he decidido y sé que las
críticas (si no algo peor) me van a llover, incluidas las de mi propio partido,
pero debo de ser honrado por encima de todo.
“De donde no hay
no se puede sacar o ¿Piensan los políticos españoles que el pueblo es tonto?,
hace apenas dos días, las y los españoles hemos sufrido “el debate de la
nación”, donde hemos tenido la oportunidad de sufrir la mediocridad de los
políticos españoles que han intervenido”.
Por parte del
presidente del gobierno de España, Mariano Rajoy Brey, y a su vez presidente de
unos de los partidos más presuntos corruptos que en los últimos cuarenta años
hemos tenido en España, nos ha obsequiado con una desfachatez que hasta la
fecha solo los más viejos del lugar recordamos en un anterior presidente,
también conservador, un tal Carlos Arias Navarro (que no descanse en paz), es
increíble que personajes como este Mariano gobiernen hoy en España, un señor
que se podría definir como un “sinsubstancia”, embustero, consentidor y lo que
es peor para la credibilidad de la política en España, de una manera u otra
seguir amparando (si no presenta una querella en los juzgados, por activa los
ampara) a mangantes como el Bárcenas –baja seguridad social enero 2013-,
Sepúlveda –baja seguridad social febrero 2013-, etc., etc., y a su vez
“favorecedor” de personajes como el Fabra de Castellón, el Camps de Valencia o el Matas de Baleares.
Como es posible que un individuo como el Rajoy, que preside un consejo de ministros
que no dicen una verdad ni aunque les pongan una pistola en la sien, que
mienten como bellacos, ejemplos, la señora Mato, los señores Montoro, Wert,
Guindos, Soria, etc., etc., pretenda hacernos creer que es lo mejor que nos ha
pasado a las y los españoles, como es posible que todavía se rían del pueblo
que les paga el sueldo, del pueblo que un día confiaron en ellos, y en lugar de
responderles, a unos (los que se quejan en manifestaciones) les envía la
policía nacional para que a base de porrazos, les callen la boca, a otros (los
desahuciados), les envían las fuerzas de seguridad para sacarlos de sus casas a
palos si es necesario, a otros (los trabajadores), los ponen en la calle cuando
les sale de los cojones a muchos empresarios corruptos (hoy en España ya
empiezan a ser muchos) que a su vez no andan muy lejos de la órbita del partido
gobernante (Díaz Ferrán como ejemplo), o el casposo empresario Arturo
Fernández, el que paga en negro, pero claro es amigo de Esperanza Aguirre y a
su vez vicepresidente de la fascista CEOE. En definitiva el actual presidente
del des gobierno español, solo por sus mentiras vertidas en el Congreso de los
Diputados, debería de dimitir y dar paso a otra persona más honrada, sin ir más
lejos la UE hoy desmiente al Sr. Rajoy, vamos que lo deja como
embustero-mentiroso: http://www.elmundo.es/elmundo/2013/02/22/economia/1361521459.html
Lo más lamentable
es que para desgracia de nosotros, el pueblo llano, el que paga los salarios de
los políticos, hoy por hoy, no tenemos un líder “en condiciones” en la
oposición, lamentablemente no lo tenemos, y esto para nosotros, el pueblo que
cada cuatro años agacha la cabeza y va a las urnas a depositar su voto, es un
desastre, seamos del partido que seamos. Hemos visto como el actual líder de la
oposición no ha dado la talla (yo pertenezco al mismo partido que el líder de
la oposición, y debo de ser honrado con mis críticas), siempre me han oído
decir que D. Alfredo Pérez Rubalcaba ha
sido el mejor Ministro del Interior (con mayúsculas) que hemos tenido la suerte
de conocer, pero honradamente debo decir que hoy como Secretario General de los
Socialistas Españoles, es el peor junto con Almunia, con mucha diferencia,
desde el Congreso de Suresnes, y esto no
solo lo paga el Socialismo Español como partido, esto lo pagamos todos, seamos
del partido que seamos, y así no se puede seguir, así solo vamos en caída
libre, como socialistas, y como pueblo vamos encaminados a un desastre sin
paliativos. En el PSOE, hay muchas personas (mujeres y hombres), jóvenes, que
“podrían” regenerar el socialismo, pero también hay muchos “elefantes” que no
quieren abandonar el sillón, ese sillón tan cómodo y que les permite hacer y
deshacer a su antojo, sin pararse a pensar que están acabando con las ideas
socialistas que nos enseño nuestro fundador y no dejan paso a estos jóvenes.
En definitiva para
ver espectáculos tan lamentables como el pasado debate de la nación, mejor irse
a pasear, ver una buena película, leer un buen libro, e incluso echarse una
siesta, se queda uno mejor y le alimenta más.
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